La historia de nuestra parroquia comienza en el año 1994, cuando se iniciaron las misas en la Escuela de Babilonia, siendo hoy día el Colegio Sede Toberín. Iniciada la construcción del colegio, las misas se trasladaron al parque Balcones de Sevilla.
En 1995, el Señor Cayetano Camelo, líder de la comunidad en compañía de sus compañeros de la Junta de acción Comunal y el padre Jorge Acevedo ayudo a dar el salón continuo al salón comunal, quedando la Capilla San pedro, ubicada en la calle 164 con 9, empezando el primer centro de culto. Con la ayuda de la comunidad y el padre Jorge, se compraron los 2 lotes donde se ubica el Templo en la cra 14 a # 163 a- 36/30. El 31 diciembre del año 2.000 con el decreto 692, el Señor Cardenal Pedro Rubiano Sáenz. erige canónicamente la nueva parroquia bajo en nombre de San Isidoro de Sevilla y se nombra al primer Administrador Parroquial el padre Mauro Edgar Parra Suárez, quien llego hacer actividades, como la rifa del desvare, para recoger fondos y pagar los lotes, con el préstamo que hizo la Vicaria, quedando deuda para los siguiente padres, entre la comunidad construyeron una rudimentaria estructura con vigas de madera y tejas de zinc.
El padre Daniel Álvarez Medina llego en el año 2006, nombrado por la Arquidiócesis de Bogotá, muy joven, recién ordenado, llego a tratar de ubicar el templo, mirando el lote que había al lado del parque Toscana, para el Templo, pero como los arquitectos lo entregaron al Distrito ya no lo devolvieron. Tomo la decisión de comprar unos lotes al lado del Colegio, para reubicar el Templo, no logrando comprar más lotes, por el costo, quedo en espera y se formaron los Salones parroquiales. Decide comprar un apartamento para la casa cural, en Dardanelos. Estando el padre Daniel se organizo la Pastoral Social, acompañado por Constanza Rubio coordinadora actual de la Pastoral Social. Promovió la Eucaristía en el Parque Toscana, celebración que hasta la fecha se sigue realizando, con la ayuda de los esposos German Henao y Patricia Cardona y actualmente de Bertha Medina
La Arquidiócesis nombra en el año 2009, al Padre Héctor Jairo Orozco Gómez, religioso Agustino, muy entregado a la comunidad, se caracterizó por seguir adelante cancelando las deudas de los lotes donde estaba el Templo, los lotes de los salones parroquiales “Dios es amor”, los cuales adecuo, adelantando la obra de construcción y reformando de los salones, con actividades entre la comunidad de feligreses de la Parroquia de san Isidoro y muchos amigos de Chía, como Bazares, Bingos, dejo cancelado el apartamento casa cural de Dardanelos, dejando a paz y salvo todos los predios, quería comenzar la construcción del Templo, por su cambio, dejo dinero para empezar la construcción del Templo. Adelanto la adecuación y arreglo de la Capilla San Pedro, dejando las celebraciones de la Eucaristía de 7:00 a.m. y 5:00 p.m., dejando celebraciones en la parroquia a las 12:00 m. y 6:00 p.m., construyo espacios en el Templo como la sacristía, el altar, varias reparaciones locativas, Como heredero de una tradición de la anterior comunidad, trajo la devoción al Señor de la Misericordia, oración que todos los lunes se celebraba, dejo muy unida y entregada a Dios toda la comunidad, con el carisma de amor y ayuda al prójimo que El sembró.
En la mitad del año 2014 llega el Padre Pedro Nel Cancino Useda, quien llego con el propósito de continuar la obra de su antecesor, la construcción del Templo, con actividades recaudo una cantidad considerable con la comunidad y logro en 6 meses reconstruir el Templo, dejándolo terminado, el 2do piso con el coro, oficinas y una Capilla para el Santísimo, dejando la parroquia nueva totalmente renovada. La labor del padre Pedro con la comunidad, fue la formación y capacitación de la comunidad parroquial en Biblia con unas excelentes presentaciones sobre la Biblia y diferentes temas, entregándole a las personas sus diplomas de los diferentes cursos.
El 9 diciembre del 2019 es nombrado el padre Fabio Feo Oviedo, quien continua con la actividad pastoral y parroquial, enfrentando la difícil situación que se vive con el covid 19, que afecto las parroquias con el cierre y la apertura de los Templos, la celebración de las Eucaristías, los montajes de los protocolos, aforos, distanciamientos, exigidos por el gobierno y Alcandía, afectando la vida litúrgica y sacramental, cambiando mucho la vida parroquial en confesiones, los cursos de catequesis de los diferentes Sacramentos que se volvieron virtuales, a finales de abril el padre Fabio enfermo, el día 17 de mayo termino su labor pastoral al ser llamado a la Casa del Padre.
A partir del 17 mayo Monseñor Juan Álvaro Zapata Vicario Episcopal, se encarga del manejo de la parroquia, hasta el nombramiento y llegada del actual párroco, padre John Álvaro Jiménez.
